Este blog nació hace algunos años y es uno de los frutos de la amistad de Felipe y Camilo, dos amigos que, gracias a sus guitarras rojas, se encontraron para darle vida a Alessandro, un chico que tiene un poquito de Felipe y otro poquito de Camilo. Viajes, porros, música, ficción, poesía y yagé, protagonizan este espacio.



martes, 29 de marzo de 2011

Para Edwin


¿Qué más se puede hacer cuando no hay más que decir? Realmente, no hay que hacer nada, de algún lado saldrán más cosas. Seguir y seguir escarbando dentro de uno, para que otras cosas salgan. De repente llegará gente que te hará pensar y ver más allá. A veces no nos damos cuenta de las enseñanzas que te da la gente. En éste caso, él no intenta cambiarte, sólo intenta sembrarte en tu corazón algo de él para que aprendas más cosas, para que crezcas un poco más, para que tengas más para pensar, para reflexionar, para filosofar, para hablar.

Y así me sucede con él, que es un sujeto muy sabio y solitario, que siempre tiene consejos absurdos para darme, que no se cansa de escucharme una y otra vez hablar de “la misma coñada de siempre”. Por mi parte, tampoco me canso de escucharle sus cuentos raros y su música extraña, de sus amores y sus teorías referentes a muchas cosas, sobre todo, al amor… después los dos pensamos por qué estamos solos…

Indagamos en por qué ese amor no nos ha tocado de esa manera, o si nos tocó, ¿por qué no nos tocó más? ¿por qué no nos duró más? ¿por qué desapareció de nuestra vida?, y recordamos y caemos nuevamente en ésa María, en esa Lucía y en esas Natalias, y llega siempre esa parte jueputa del amor…pero seguimos solos, pensando quizá algún día encontrar en otras personas a ellas, pero nos damos cuenta que es imposible, que ellas son las que nos mueven y nos hacen vibrar, que como ellas, ninguna.

Luego aparecen otras, que pensamos que ésta vez sí será pero después no es. Y así, en el amor, como en la vida, un constante cambio. Él es un poco más controlado que yo, yo soy un poco más loco y desordenado, pero nos encontramos en algo, que sentimos y pensamos diferentemente similar.

Y seguimos solos, y seguimos solos… Buscando ese amor, diciendo mil estupideces cuando nos gusta alguien, llegando a la conclusión que eso de la dignidad no es algo que tenga que ver con nosotros, y ahí empezamos a emplear las múltiples teorías para la “seducción” y finalmente no nos resultan, después de habernos expuesto a grandes ridículos, pero, finalmente, ¿qué más da? Se pasó bueno.

Agradezco a la vida por encontrarme con ese ser, que desde un principio sabía que era diferente, cuando llegó al colegio en décimo grado y decía ser conservador y nos la pasábamos tocando guitarra, cantando canciones de Drake & Josh, haciendo intentos fallidos de cocinar torta de patatas que terminó siendo huevos con papa, cuando queríamos tocar glamm punk y muchas otras cosas, cuando se caía jugando baseball en clase de educación física, cuando le teníamos apodo a las lindas del colegio, a lulito y lulazo, cuando se ennovió con una chica que era igualita a Dora la exploradora, y mientras tanto, yo, me escondía cada vez que pasaba mi acosadora y él me decía, ¿Camilo, cómo pudo meterse con ella?

Ahora, ya después de mucho tiempo, cuando nos hemos tragado toda la basura que alguna vez dijimos ser, cuando nos cansamos de seguir siendo un balde al cual los profesores sólo depositan ahí sus dichos “conocimientos” para almacenarlos en nuestros cerebros sin realmente querer enseñar....y gracias a eso por fin llegar a la conclusión de que es el amor al aprendizaje lo que nos hace crecer, que lo que hay que hacer es aprender a pensar para poder decidir por nosotros mismos, para poder ser, para levantarnos y decir que nuestros días serán maravillosos, encontrando magia en las cosas más pendejas, como comprar papas fritas y cerveza y depositarla en la bolsa de las papas mientras la gente se asusta mientras nos ve comer y beber a la vez.

Todo con él tiene sentido, hasta las cosas que no tienen sentido, filosofar las grandes estupideces de la vida junto a él me llenan. A veces pienso por qué tenía que estudiar en ese colegio,

y hoy me doy cuenta, que tenía que hacerlo para conocerlo a él.

A mi querido amigo, que me ha enseñado a ver las cosas de otra manera, me ha enseñado a ser respetuoso, a ponerme en los zapatos de los demás, a ver que no todo el mundo es tan caótico como yo.

El tiempo pasa muy rápido, y muy pocos quedan, pero él queda, y siempre quedará, así por circunstancias de la vida nos alejáramos, no importa, él siempre estará.

Porque logró sembrar en mi corazón, y sé que también algo sembré en su corazón.

La magia y la racionalidad están tan metidas, son una misma, la capacidad de volver todo extraordinario cuando no se parte de lo extraordinario es posible, enamorarse también lo es, aunque ambos nos sentimos estúpidos cuando nos enamoramos, porque hace tanto no tenemos novia, porque ya se nos olvidó cómo es esa cosa, porque nos cagamos del susto al imaginarnos con alguien, pero siempre damos nuestro brazo a torcer, y nos perdemos.

Y finalmente, cuando creemos que la vida es desgraciada con nosotros, podemos escuchar Jack Jhonson, dormir un poco,

tocar guitarra y saludarnos por msn o facebook, y decir, qué hubo webon.


CamiloArt

No hay comentarios:

Publicar un comentario