Este blog nació hace algunos años y es uno de los frutos de la amistad de Felipe y Camilo, dos amigos que, gracias a sus guitarras rojas, se encontraron para darle vida a Alessandro, un chico que tiene un poquito de Felipe y otro poquito de Camilo. Viajes, porros, música, ficción, poesía y yagé, protagonizan este espacio.



jueves, 19 de enero de 2012

El siguiente texto fue escrito por el inolvidable Charles Chaplin.





Cuando me amé de verdad, comprendí que en cualquier circunstancia, yo estaba en el lugar correcto y en el momento preciso. Y, entonces, pude relajarme. Hoy sé que eso tiene nombre… autoestima.

Cuando me amé de verdad, pude percibir que mi angustia y mi sufrimiento emocional, no son sino señales de que voy contra mis propias verdades. Hoy sé que eso es…autenticidad.

Cuando me amé de verdad, dejé de desear que mi vida fuera diferente, y comencé a ver que todo lo que acontece contribuye a mi crecimiento. Hoy sé que eso se llama…madurez.

Cuando me amé de verdad, comencé a comprender por qué es ofensivo tratar de forzar una situación o a una persona, solo para alcanzar aquello que deseo, aún sabiendo que no es el momento o que la persona (tal vez yo mismo) no está preparada. Hoy sé que el nombre de eso es… respeto.

Cuando me amé de verdad, comencé a librarme de todo lo que no fuese saludable: personas y situaciones, todo y cualquier cosa que me empujara hacia abajo. Al principio, mi razón llamó egoísmo a esa actitud. Hoy sé que se llama… amor hacia uno mismo.

Cuando me amé de verdad, dejé de preocuparme por no tener tiempo libre y desistí de hacer grandes planes, abandoné los mega-proyectos de futuro. Hoy hago lo que encuentro correcto, lo que me gusta, cuando quiero y a mi propio ritmo. Hoy sé, que eso es… simplicidad.

Cuando me amé de verdad, desistí de querer tener siempre la razón y, con eso, erré muchas menos veces. Así descubrí la… humildad.

Cuando me amé de verdad, desistí de quedar reviviendo el pasado y de preocuparme por el futuro. Ahora, me mantengo en el presente, que es donde la vida acontece. Hoy vivo un día a la vez. Y eso se llama… plenitud.

Cuando me amé de verdad, comprendí que mi mente puede atormentarme y decepcionarme. Pero cuando yo la coloco al servicio de mi corazón, es una valiosa aliada. Y esto es…saber vivir!

No debemos tener miedo de cuestionarnos… Hasta los planetas chocan y del caos nacen las estrellas.

Charles Chaplin

martes, 17 de enero de 2012

Doji

Realmente hay dias que me gustaria q un trasmilenio a toda velocidad atropellara a un gato gay. Son esos dias rotos donde solamente estoy yo enfrentado ante un mundo roto, indiferente y frio. Son dias en los que la necesidad de escribir es tan fuerte como la necesidad de ir al baño, son los dias en los que un gato corre hacia su hogar para refugiarse entre las letras del viejo libro de la montaña errante. Y una vez que se plasma la idea, una vez que ya esta ahi guardada y no se va a perder, se siente un placer delicioso.

Esos días que sueño saltar y ser simplemente devorado por la velocidad. Esos días en los que todos los sucesos ocurren. No voy a decir que ocurrieron bien, o mal. Hoy no voy a dar mi interpretación de los sucesos, otro gato lloraria, yo no. En el mundo hay sucesos, y me entero de ellos, es fácil, suave y sencillo. Mi corazón permanece cálido.

Me gusta estar un poco loco, me gustaría drogarme todos los días. Ahora me estoy alimentando de películas, estoy esperando que mi cerebro se seque de ver tantas peliculas de la misma manera ocmo el de don quijote se seco por leer tantos libros de caballeria. La vida de un gato gay es cosa seria, somos uno seres que transitan entre las ciudades de fantasia y las ciudaddes reales.

El otr día me encontre con un gato invisible. Y me contó su historia. Era lindo y estaba enamorado, era feliz aunque era invisible, y ser invisible lo llevó a la desgracia justo cuando se dio cuenta que era invisible. Solia paser por las mañanas, ir al colegio, ir a la universidad, montar en trasnporte publico, como todos los gatos lo suelen a hecer alguna vez en su vida. Descubrió que era medio marica pero vivio tranquilo por eso.

Lo que lo empezó a intranquilizar, no fue que le empezaron a gustar los gatos mas que las gatas, lo que le sucedió fue algo más opaco. Se enteró que ningún gato se fijaba en él, y no por ser gatos heterosexuales, heteronormativos, No. Ningún gato se fijaba en él porque era un gato invisible.

Al pasar los dias, las semanas y los meses, se dió cuenta que también era invisible para los humanos, para los carros, e incluso para los trasmilenios y los transformers que habitaban la ciudad. Fue un descubrimiento cruel a decir verdad, cómo lograría un trasmilenio a toda velocidad atropellar a un gato invisible, si no lo veia ?... creo que estaba irremediablemente amarrado a la vida por ser invisible. Yo estoy irremediablemente amarrado a la vida porque amo a una persona y me ama.

El gato invisible se llamaba ,y siendo este un nombre tan extraño para un gato invisible, no le importaba mucho, de hecho la gente nunca pronunciaba su nombre. Muy pocos lo hemos pronunciado. Algunas noches él me preguntaba que se sentía ser llamado por el nombre, a lo que yo respondí - normal. Y que es ser normal? -preguntó. Mierda, esa pregunta si esta jodida. Así fue como me hize amigo de .


Los gatos invisibles son sujetos extrñaos, yo solo conozco a uno, y realmente fue bastante dificil encontrarlo. Nos conocimos en un bar de rock, yo escuchaba AC/DC desde el tejado y resbalé. Al caer choque con algo que mauyó. Fue extraño. Aparecieron pisaditas en la arena que se alejaban rápidamente. Yo le dije, ey! espera!- no te asustes hermano. Yo sabía que existian los gatos invisibles, y fue la primera vez que me encontraba ocn uno, cara a cara. o cara a cola, o cara a espalda, como sea, estaba cerca.

Le dije, ey amigo, no tengas miedo, me llamo DOji, y tu?, y me dijo me llamo . Así fue como lo conocí. Era tímido y serio, pero no por eso menos interesante que muchos de los otros gatos que había conocido en aquel bar de rock para gatos gay. Empezamos a conversar y me contó como poco a poco se había vuelto invisible. Fue una historía que me produjo alegria y nostalgia a la vez.

él suspiraba al contarme esa historia, le dio ganas de seguirlos, ver lo que sucedía en la casa mientras estaban solos. No. mejor volver al bar y escuchar AC/DC. era un gato sabio dentro de toda su pena. Ese mismo día se paró frente a un televisor que daban el partido de la selección nacional de futbol, esperaba chiflidos y alaridos de la gente. Pero nó. nadie lo vió. es como si no existiese.

él habia intentado salir con varios gatos anteriormente, se hablaban por chat, se hablaban por telefono, auqn él era muy callado algo hablaba. En el momento de citarse personalmente, siempre llegaba puntual, y recibía llamadas, mensajes y reclamos por dejar plantado a quien lo esperaba. Y él nunca los dejo plantados!! ahi estaba! - ey, gato de mierda! pq no les dices "hola aqui estoy"...- No fui capaz doji, me da pena decir que soy un gato invisible, perdon.

Definitivamente este gato tenía problemas. Despues de varias decepciones amorosas que nunca surgieron, despues de varios partidos de futbol en la televisión y despues de varias citas que no resultaron decidió suicidarse. Tenia mucho miedo, pero un día, una noche en que el enamorado de su vida le dio la espalda completamente para correr por alguien, tomó la decisión de saltar.

Se paró en el borde de la estación y esperaba un trasmilenio que no parara en aquella estación, un bus que pasara lo más rápido posible, saltaría. Pero peor fue su desgracia, al darse cuenta que el bus jamás lo mataría por ser un gato invisible. Estaba condenado a seguir viviendo así.

Mientras escuchaba su historia fume uno de esos malboro ice que se les espicha la bolita para que sepan diferente, se lo pasé a él y ví como sus pulmoncitos se llenaban de humo que danzaba en su interior, fue muy bonito y creo que me enamoré de lo que ví. Para desgracia mia, el gato invisible tenia una maldición que sólo entendí hasta ese momento. Cuando alguien se enamorara de él, también se volvería invisible.

Y solo entonces, siendo invisible yo, doji, empecé por perder mi nombre, al otro día me llamé doj, al siguiente do, al otro día d, finalmente me llame , como mi amigo. Y sentí en carne propia lo que es ser un gato invisible, invisibilizado por la sociedad, un gato que fuma indiferencia toda su vida y que es y a la vez no es nada. Mierda, si que es una vida jodida.

Eramos dos gatos invisibles enamorados. Tocarnos fue algo divertido, sobre todo porque al principio no sabiamso odnde teniamos cada parte, dejame morderte la oreja, dejame aruñarte el pecho. le mordía la pata, le aruñaba la cola, nuestros encuentro eróticos eran un total fiasco. Pero poco a poco empezamos a conocer nuestros cuerpos, a leer nuestros movimientos así no nos vieramos, yo sabia cómo se movia él, el sabia cómo me movia yo. Era un juego espectacular. hacer el amor a lo invisible.

Y nos enamoramos más y más, y todas las noches sobre el tejado haciamos el amor, y era la experiencia mas hermosa de todas, era un juego invisible, un juego de sonidos, un juego de tacto, de sabor, de tantos sentidos olvidados. Fue tana absolutamente placentero cada encuentro que todo el dia esperaba la noche para verme con él. Sin embargo esteban empezaba a extrañarme.

Despues de unos meses de relación, empezamos a hacerlo en lugares públicos a la llus del sol, absolutamente expuestos ante todas las personas, perdimos pudor porque no nos veían, la ciudad de la indiferencia era enorme y podiamso explorar cada rincon sin el menor riesgo. La experiencia fue exquisita, asfalto, pasto, techos, cemento... cada superfie fue nuestro campo de amor, cada arbol fue testigo, miles de personas pasaban a nuestro lado y nosotros ismplemente callabamos. Eramos dos gatos invisibles enamorados.

Hasta que un día sucedió. Me enteré del otro gran secreto de . Su primer secreto, era que el gato que se enamorar de él se volvería invisible. El segundo secreto era aún más enigmatico. Lo descubrí una tarde mientras jugabamos en el parque de la ciudad, nos acariciabamos, nos lamiamos las piernas y la pancita, jugabamos con nuestras patas y definitivamente nos queriamos mucho. Empezamos a hacer el amor.

Ese dia fue mejor que todos los días, ese día fue orgasmo tras orgasmo, exploramos todos nuestros cuerpos, todas las posibilidades, realmente nos conociamso tanto que sentiamos que eramos uno mientras haciamos el amor. Y fue presisamente, en el instante de placer máximo, ambos nos sentimos uno al mismo tiempo, sucedio que nuestros cuerpos realmente se volvieron uno.

El otro gran secreto de era su capacida de fusionarse con otro gato invisible en el momento orgasmico del amor. Y no solo fusionarse. Al ser uno con él lo perdí, me perdí. Sentí que era nuevamente solo yo, ya no tenia un cuerpo invisible. Estaba ahí echado en el parque acostado boca arriba, tan feliz como estas luego del mejor sexo de tu vida, y tan triste como estas al perder a quien tanto amas. Tan feliz de saber que eres uno con quien amas y tan triste de saber que ya no son dos. Fue el momento más extraño de mi vida.


Ahora soy un gato triste y feliz. Ahora me amo mucho. Ahora me vuelvo al llamar Doji, y quiero gritarle a todo el mundo que ME AMO MUCHO! y que ya hice el amor conmigo mismo y que fuimos uno y desde entonces somo uno.